EL ORGASMO FEMENINO

¿Hay diferentes tipos de orgasmos femeninos?

Antes de entrar a detalles, o de responder esta pregunta, tenemos que hablar sobre la mentira del “orgasmo vaginal”, y sobre otros aspectos interesantísimos.

Bien, al comenzar la búsqueda de información, encontré un escrito completo y maravilloso, en el que estaba toda la información que quería compartir, por lo que, he decidido hacer un sólo análisis y resumen de este, se llama “El mito del orgasmo vaginal”, escrito por Anne Koedt, aquí mismo, las invito a leerlo completo, está súper fácil de encontrar en Google.

Anne Koedt ​ es una escritora feminista radical estadounidense. Es la autora de El mito del orgasmo vaginal (ensayo feminista clásico sobre la sexualidad de las mujeres).​ Fue miembro activo del grupo New York Radical Women y fundó, junto con Shulamith Firestone, New York Radical Feminists.​

Comienza con el siguiente término

FRIGIDEZ

Cuando una mujer no llega al orgasmo con el coito, se le denomina “frígida”, esto con el fin de culpabilizarnos, solo no hay que mencionar la tasa increíblemente enorme de mujeres “frígidas”, porque si no, veríamos al verdadero culpable de nuestra impotencia sexual.

Anne Koedt, hace mención al “Padre del psicoanálisis” y su enorme aportación a la desinformación sobre el orgasmo femenino, ya que, Freud, en todas sus obras demuestra su misoginia y falocentrismo, así que no es la excepción aquí. [La cura que él recomendaba para una mujer frígida era la atención psiquiátrica, puesto que sufría de incapacidad para ajustarse mentalmente a su rol “natural” como mujer].

Además, el badulaque de Freud (insulto amigable y family friendly), refiere que no alcanzamos el orgasmo mediante el coito por “la envidia a los hombres”, el diagnóstico fue: un fenómeno antimasculino.

Okey, ya vimos lo absurdo de la frigidez, vamos a dirigirnos ¿qué ganan con esto?

Se sabe que todo esto es intencional, pues sí se tenía y tiene el conocimiento de que el clítoris es el órgano esencial para la masturbación y el orgasmo, pues en el “juego previo” si que saben que al estimularlo se logra la excitación y lubricación necesaria para la penetración, y cuando se logra “el efecto deseado” se olvidan completamente de nosotras y se centran en su propia satisfacción sexual, los hombres prefieren la penetración puesto que es el mejor estimulante físico para el pene, añadimos que a la mujer no se le percibe como una persona, con deseos y necesidades, por lo que siempre pasa a segundo plano, spoiler: ni siquiera existe el segundo plano, este mundo patriarcal sólo actúa por los intereses masculinos.

También es de nuestro conocimiento que los hombres son falocentristas, y como Freud, creen ser superiores y envidiados por su pene, sin embargo, el clítoris es demasiado similar al pene, es por esto que, aceptar su similitud afectaría al ego de los varones, por lo que optaron por ignorar su existencia, así, no les tiembla la masculinidad, Anne lo dice de esta manera

“me queda claro que los hombres, de hecho, temen al clítoris como una amenaza a su masculinidad”

Habla también, de que el darle protagonismo al clítoris, es hacer prescindible al hombre y a su “magnífico pene”, aquí se agrega otro tema importantísimo, el lesbianismo, el reconocimiento del orgasmo clitoridiano amenaza el régimen heterosexual, porque nos quitamos la benda de los ojos que nos dice que solo podemos dar y recibir placer de un hombre.

Ahora sí, ¿existen diferentes tipos de orgasmos?

Puedo decir, que no

Existen muchas zonas erógenas, pero sólo el clítoris hace llegar al clímax, todos los orgasmos son extensiones de la sensación de esta zona. Es decir, la responsable de cualquier orgasmo es el clítoris, lo único diferente es la forma en que se estimula.

BENDITA SEAS CLÍTORIS

Quisiera comentar un poco más sobre conceptos biológicos en el orgasmo de las mujeres, pero se sorprenderían de lo falocentristas y machistas que han sido a lo largo del tiempo y que así siguen siendo, haciendo referencia a nuestros orgasmos como algo sin importancia, o de simple interés adaptativo, además de hacer nula mención del clítoris, cuando el tema es el orgasmo.

Entonces, podemos terminar mencionando el gravísimo daño que el régimen del “orgasmo vaginal” nos ha causado a las mujeres, porque como ya mencione, nos culpabiliza, nos trata de descompuestas, causando inseguridades y odio hacia nosotras mismas, sin mencionar que nos quedamos insatisfechas sexualmente, porque si no se puede alcanzar el orgasmo con un varón, tampoco se podía acudir a la masturbación por los estigmas alrededor de ella. Nos limitó por tanto tiempo de las relaciones lésbicas, de orgasmos increíbles, y como en todo lo demás, nos limitaron el conocimiento de nuestra propia cuerpa, y en su lugar, nos llenaron de vergüenza sobre ella.

Entonces, tomo este espacio, para invitarlas a disfrutar su sexualidad consigo mismas, sin necesitar de nadie más.

Toquense, ámense, disfruten de su cuerpa y no dejen que nadie las limite.

Evelyn LO.